La inmologística, como disciplina enfocada en la gestión eficiente de almacenes y centros de distribución, se enfrenta al reto de adoptar prácticas más sostenibles y reducir su huella ambiental.
En un momento en el que el cuidado del entorno y la eficiencia operativa son cada vez más críticas, el real estate logístico se encuentra en un punto de inflexión donde la integración de energías más limpias se vuelve imperativa.
Y es que, en este campo, la búsqueda de la eficiencia no solo se limita a la optimización de procesos internos, sino que también abarca la forma en que se abastecen y consumen los recursos energéticos.
Cabe destacar que, alineado con el ODS 7, que busca garantizar el acceso a una energía asequible, fiable, sostenible y moderna para todos, el progreso acontecido en los últimos años ha llevado a que, en la actualidad, alrededor del 47% de la energía que se genera en España sea renovable.
Es en este contexto que las alternativas limpias emergen como una solución clave para hacer frente a múltiples desafíos, ofreciendo una ruta hacia la sostenibilidad mientras se impulsa la eficiencia operativa.
Clean energy en inmologística
La inmologística puede beneficiarse de diversas fuentes de energía limpia provenientes del aire, el agua y el sol.
Ante esta diversidad de alternativas, la energía solar emerge como la opción más popular debido a su versatilidad y capacidad para alimentar sistemas de iluminación, equipos de climatización y otros dispositivos dentro de los almacenes y centros de distribución. La energía eólica también ofrece ventajas significativas en áreas con vientos consistentes, proporcionando una fuente confiable de energía renovable.
Sin embargo, es crucial evaluar las ventajas y desventajas de cada una en términos de eficiencia operativa y viabilidad económica para cada ubicación específica.
Si buscamos ejemplos concretos de implementación exitosa de energía limpia en la inmologística podemos dar con esquemas de paneles solares en cubierta, como el proyectado por GLP Clean Energy en G-Park Sagunto que, con cerca de 7.000 placas y 21 convertidores, generará un ahorro de más de 11.000 toneladas de CO2 a lo largo de su vida útil, lo que equivale a plantar aproximadamente 15.000 árboles.
Integración de energía limpia y eficiencia operativa
La adopción de energía limpia no solo beneficia al medio ambiente, sino que también puede mejorar significativamente la eficiencia operativa en la inmologística.
La implementación de tecnologías inteligentes, como sistemas de gestión energética y dispositivos de monitorización en tiempo real, permite una mejor optimización de la distribución de energía dentro de los almacenes y centros de distribución. Esto puede conducir a una reducción de los costes operativos al minimizar el desperdicio de energía y mejorar la productividad de los equipos y procesos logísticos.
Diversos casos muestran cómo la integración de energía limpia con tecnologías avanzadas, como la automatización y la inteligencia artificial, puede generar mejoras significativas en la eficiencia operativa. Por ejemplo, la combinación de paneles solares con sistemas de almacenamiento de energía y vehículos autónomos en almacenes puede permitir una operación más eficiente y flexible, reduciendo los tiempos de inactividad y aumentando la capacidad de respuesta a la demanda del mercado.
Desafíos y estrategias de implementación
A pesar de los beneficios potenciales, la implementación de energía limpia en la inmologística presenta desafíos únicos que deben abordarse.
Los costes iniciales de inversión pueden ser significativos, especialmente para las soluciones altamente tecnológicas. Además, la infraestructura requerida para integrar eficazmente la energía limpia en las operaciones logísticas puede variar según la ubicación geográfica y las regulaciones locales.
Para superar estos desafíos, las empresas pueden adoptar estrategias proactivas, como buscar modelos de financiación innovadores, aprovechar incentivos gubernamentales y colaborar con proveedores y socios estratégicos, como GLP Clean Energy.
La adaptación a las regulaciones ambientales y la sensibilización sobre los beneficios a largo plazo de la energía limpia también son fundamentales para promover una transición exitosa hacia una inmologística más sostenible.
La llave para un futuro resiliente
En suma, la integración de energía limpia en la inmologística no solo representa una respuesta necesaria a las crecientes demandas de sostenibilidad y eficiencia operativa, sino que también abre nuevas puertas al sector.
Al adoptar prácticas más sostenibles y reducir su huella ambiental, los usuarios de estas infraestructuras pueden mejorar su competitividad, fortalecer su reputación y contribuir de manera significativa a la mitigación del cambio climático.
Sin embargo, para aprovechar al máximo los beneficios de la energía limpia, es crucial que los expertos trabajen en colaboración, compartiendo conocimientos, mejores prácticas y recursos para superar los desafíos técnicos, financieros y regulatorios asociados.
Al hacerlo, no solo se podrán optimizar las operaciones, sino también sentar las bases para un futuro más sostenible y resiliente en la cadena de suministro global.