En el vibrante y competitivo sector inmologístico, los profesionales afrontan una decisión crucial que puede definir el éxito de sus operaciones: ¿priorizar la cercanía a los centros urbanos o apostar por el tamaño de las instalaciones?
Este dilema, que refleja la tensión entre velocidad de entrega y eficiencia operativa, se ha vuelto más relevante que nunca ante el creciente auge del comercio electrónico, la omnicanalidad, la escasez de suelo disponible y las recientes subidas de los tipos de interés.
A medida que la demanda de servicios de última milla se dispara y las expectativas de los consumidores evolucionan, la elección entre proximidad y tamaño no es solo una cuestión logística, sino una decisión estratégica fundamental.
La proximidad: el imperativo de la última milla
La cercanía a los centros urbanos se ha vuelto indispensable, especialmente con el crecimiento exponencial del comercio electrónico y la necesidad de servicios de última milla eficientes. Los consumidores ahora demandan entregas rápidas, incluso el mismo día, lo que obliga a las empresas a buscar centros logísticos cercanos a las áreas urbanas densamente pobladas – donde se encuentran sus clientes finales -.
Sumado a ello, el reciente auge de la omnicanalidad, que combina la experiencia física y digital del comercio, otorga una nueva dimensión al concepto de proximidad. Los consumidores desean flexibilidad para recoger productos en tiendas o recibirlos en sus domicilios. Esto requiere de una red logística ágil y cercana que, poco a poco, está dibujando un nuevo ecosistema inmologístico.
Sin embargo, la proximidad tiene sus desafíos. La escasez de suelo urbano eleva los costes, y encontrar grandes espacios cercanos a las ciudades es casi imposible. Aquí es donde entra el dilema: optar por instalaciones más pequeñas y múltiples para mantener la proximidad, o buscar grandes centros alejados.
Tamaño: escalabilidad y eficiencia
El peso asociado al tamaño de las instalaciones inmologísticas tampoco puede ser subestimado.
Los grandes centros permiten a los usuarios de las infraestructuras manejar mayores volúmenes de inventario, lo que se traduce en una mejor gestión de la demanda y en el consecuente aprovechamiento de las economías de escala. Además, las instalaciones más grandes suelen estar equipadas con tecnología avanzada y soluciones automatizadas que mejoran la eficiencia operativa.
Estos centros, ubicados habitualmente en las zonas periféricas, se ven menos influenciados por el factor de la escasez de suelo y la complejidad de inversión asociada a los terrenos más próximos a las urbes.
Por ello, no sorprende que, según los últimos estudios, el próximo millón de metros cuadrados logísticos que se sumarán este 2024 a las dos grandes capitales de España, Madrid y Barcelona, estén concentrados, principalmente, en las terceras coronas.
No obstante, estar lejos de los núcleos urbanos, si bien puede asociarse a diversas ventajas, también puede llevar a un incremento en los tiempos y los costes de transporte para la última milla, precisamente el área donde la proximidad aporta más valor.
OAXIS: un nuevo paradigma que responde al dilema
OAXIS GLP Park Madrid Villaverde es un excelente ejemplo de cómo las empresas pueden encontrar el equilibrio entre ambos factores sin tener que renunciar a uno para obtener los beneficios del otro.
Este parque logístico no solo se beneficia de su proximidad a Madrid, ubicado en el anillo de la M-40, sino que también ofrece instalaciones modernas y escalables que pueden adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado.
Con 270.000 metros cuadrados de parcela, OAXIS ofrece una flexibilidad urbanística y de uso sin precedentes para cualquier operativa en el mercado inmologístico de la primera corona de Madrid, combinando la ventaja de la cercanía con la capacidad de manejar volúmenes significativos de inventario.
Este tipo de instalaciones representan una solución frente al dilema entre proximidad y tamaño, proporcionando una ubicación estratégica sin sacrificar la capacidad operativa.
Dibujando una nueva inmologística
Como demuestra OAXIS, el dilema entre proximidad y tamaño en la inmologística requiere de un enfoque equilibrado y adaptable. La clave para navegar con éxito este desafío radica en la capacidad para evaluar cuidadosamente las necesidades específicas de cada empresa y adaptarse rápidamente a las condiciones del mercado.
En un entorno económico y financiero en constante cambio, marcado por la escasez de suelo y el encarecimiento de la financiación, los stakeholders del sector deben mantener una mentalidad de innovación continua.
Con estrategias bien planificadas que integren vanguardia, flexibilidad y sostenibilidad, es posible optimizar tanto la eficiencia operativa como la satisfacción del cliente.
En última instancia, aquellos que logren adaptarse y anticiparse a las tendencias estarán mejor posicionados para asegurar el éxito en el competitivo sector logístico, dibujando así una nueva inmologística que no solo responde a las demandas actuales, sino que también está preparada para los retos futuros.